Un extra?o conjunto de sonidos hacían presencia en el cuartel de los ángeles de Lukrania, y fueron esos mismos sonidos los que recibieron a Dirts Storm luego de su patrulla matutina. El gordo estaba algo desconcertado por esto, por lo que con curiosidad y cierta cautela, decidió buscar el origen de los mismos.

  El ruido era una mezcla particular de sonidos de botones, perillas, líquidos goteando y el, para él inconfundible, sonido de una computadora realizando algún proceso. El héroe se metió por el pasillo por el cual se ingresaba a las diferentes habitaciones del cuartel. Iba por el camino correcto, siendo que con cada paso el ruido parecía ser más cercano, sumándose a toda la composición previa del mismo un sonido de carácter más vocal, como una risita.

  El pasillo, el cual estaba bastante oscuro por alguna razón, se veía iluminado por la luz que se emite desde un cuarto en específico, el taller de Parriz. Brian, con bastante intriga por lo que estaba pasando, decide aproximarse a ver qué es lo que hace el científico.

  _ Hu, ani miklel otech! tmid tsad achad kadima!_ gritan desde otra de las habitaciones.

  Dirts Storm casi se cae del susto, pero no tarda en revisar la fuente de ese grito.

  _ ?Qué…? Ah, solo eres tú _ el mugriento se calma al ver que solo se trataba de Emoon gritándole a la computadora. El emo noto su presencia, pero no fue suficiente para sacar su vista de la pantalla.

  _ Ni se te ocurra encender las luces. Necesito toda la fuerza de la oscuridad para enfrentar a este demonio de la internet _.

  _ Emh… ?Qué es lo que está haciendo el doctor Parriz? _.

  _ Ah, ?qué sé yo? Pregúntale vos _.

  Ante la falta de respuestas, Brian decide simplemente entrar en el lugar de trabajo del científico. El susodicho se encontraba pasando de un lado a otro sobre una silla con rueditas. Tecleaba unas cosas en una computadora, luego pipeteaba unas muestras y las colocaba en un analizador, luego giraba unas perillas y oprimía unos botones. Todo eso con una sonrisa de genuino disfrute, y dejando escapar cortas risas en cada acción.

  _ ?Doctor?_ le preguntó Dirts Storm.

  _ Momento, momento…_ ingresó unos últimos datos en su computadora y le dio a enter, posteriormente, una hoja comenzó a imprimirse junto a la misma _ ?Aja! ?Espléndido! ?Dónde había estado esta rama de la ciencia en toda mi intellectual vida?_ el Líder tomó el control del cuerpo y recogió la hoja recién impresa.

  _ Hey, llegas justo a tiempo _ dijo a Brian.

  _ ?Qué es eso?_.

  _ La secuencia de ADN del loquito de la plasticola. Ahora…_ se acercó a otra computadora sobre una de las mesas e insertó la hoja en una especie de fax _ Vamos a compararlo con la base de datos _.

  _ ?Buscaras en los datos de toda la ciudad? Te tomará horas, quizá días _ le dijo Brian mientras se ponía a su lado para ver la pantalla.

  _ No, solo en los de los ofensores sexuales registrados por la policía _.

  _ Ah, le pediste al oficial Herman que te los diera _.

  _ No, me los robé cuando fuimos a la comisaría la semana pasada, pensé que podrían sernos útiles en algún momento _.

  = Mansa rata =.

  Los nombres pasaban unos tras otros, apenas daba tiempo a leerlos antes de que la falta de coincidencia los descartara, hasta que finalmente obtuvieron un positivo.

  _ Bingo _ Crownwell abrió el archivo del sujeto coincidente para así ver sus antecedentes.

  _ Fabian Peraso…_.

  = ?Quién mierda es ese?=.

  _ Hum, masculino de 48 a?os… Gimnasta sobresaliente en su juventud… Primer arresto a los 25 por exhibicionismo, y segundo, y tercero, y cuarto…_.

  = A la mierda =.

  _ A los 30, y con ya 178 causas, se le realizó un examen psicológico, bla bla bla… Se determinó que el paciente sufre una necesidad incontrolable de jugar al ``juego de la galleta′′, ya sea en grupo o en solitario. En base a las opiniones médicas pertinentes… Se condena al acusado a la castración química _.

  _ ?Castración química? Eso le impediría seguir jugando _.

  _ Pues parece que encontró una forma de reemplazar el joystick _ Johan continuó leyendo el archivo _ Mmm, aquí dice que su último registro fue haber sido contratado por el hotel Regular view, donde ha estado trabajando desde hace 10 a?os _.

  _ Regular view…, claro, todos los ataques después del de Oger′s Mouth fueron hechos por esa zona _.

  _ Tendremos que hacerle una visita _.

  Los héroes comenzaron a discutir el plan para atrapar a Cookie Milker, pero había alguien más escuchando su conversación, y no era Emoon. Metal Man había estado prestando atención a sus palabras, había llegado al cuartel sin ser notado, gracias en parte a que los gritos hebreos del espectro emo habían cubierto su estruendosa entrada.

  Ricardo no podía creerlo, su compa?ero de tantos a?os era un villano, eso le causaba ira. Salió del lugar en silencio. Ya lo había decidido, este asunto comenzaba a ponerse muy personal, sería él mismo quien atrapara a Cookie Milker y lo entregaría a la justicia, luego de darle una buena zarandeada primero.

  Cayó la noche, estaba nublado y frío. Era viernes, y un pobre infeliz decidió salir del hotel para consumir un poco del ambiente nocturno de la ciudad. Pensando en los placeres por encontrar e ignorando por completo los posibles peligros. Esta zona de la ciudad estaba cada día más muerta por estas horas, nadie quería arriesgarse a ser el próximo emplasticolado que saliera en los diarios de ma?ana, pero siempre hay algún temerario, o boludo.

  El joven caminaba por las despobladas veredas, pasando de un lado a otro de la calle, algo tonto, pero no siempre se podía hacer eso en una ciudad como esta. Los pocos autos que pasaban lo hacían de forma veloz, en parte aprovechando la falta de movimiento y en parte para evitar estar por estos lares mucho tiempo.

  Una llamada telefónica interrumpe el despreocupado andar de nuestro sujeto. ?Un amigo, quizás? Quien sabe, pero atendió, y comenzó a hablar mientras se recostaba contra un poste de luz. Sus acciones eran bien vigiladas por una figura sombría a varios metros. El sombrero, la chaqueta, la respiración agitada que comunicaba su deseo. Comunicaba las perversas ideas que pasaban por su mente al ver a aquel joven tan expuesto, ahí, en la poca luz en medio de la oscuridad, como si se lo estuvieran ofreciendo.

  Cookie Milker comenzó a caminar. Iba lento, parecía tranquilo, no lo estaba, pero eso parecía. Sus zapatos hacían que sus pisadas resuenen por el barrio, seguramente causando paranoia en la gente que, ante su amenaza, estaba acovachada en sus hogares. Y el tipo estaba ahí, hablando, riendo, completamente ajeno a su alrededor y a quien venía. El único ojo que la máscara del villano dejaba ver estaba bien fijo en el objetivo, pues no necesitaba más que fijar a la presa, ya que todo lo demás le salía de forma natural, casi automática. Metió la mano en su chaqueta y sujeto el pote del pegamento blanco. Junto a este último estaba la bolsa de galletas, pero a esa le tocaba salir un poco más tarde.

  Cookie Milker se detuvo a un metro de la espalda del joven. Es difícil deducir lo que puede estar ocurriendo en esa retorcida cabeza en este preciso instante, en el instante antes de la liberación. El villano alza el pote para dar comienzo a su salvajia, pero antes de que sus veloces manos pudieran oprimirlo, él hace presencia.

  Un grito gutural, seguido del estruendo de una mole de músculos aterrizado en el pavimento, atraen la atención de víctima y victimario. El héroe del metal alza la cabeza para observar a su objetivo, el cual contempla su intimidante rostro con temor. El joven retrocede por la impresión, y al hacerlo se topa con Cookie Milker tras él, a lo que se asusta y huye lo más rápido que puede.

  _ Ya saber quien sos _ le apuntaba con sus grandes dedos.

  El se?or fetichista de la noche fija su ojo en el héroe, el miedo es grande, pero la locura lo es más, por lo que se pone firme y le dice:

  _ Parece que el destino por fin me ha alcanzado después de todos estos a?os, pues ven, ángel de la muerte, acabame o fracasa en el intento, no tendré miedo en ninguno de los casos _.

  _ Grgrgr… Loco…de…?Mierda!_.

  Metal Man hace el primer movimiento. Tensa su cadena y la usa como látigo en contra del Cookie Milker, pero este consigue evitar el golpe saltando sobre la misma, para luego responder con un chorro de plasticola a la cara. Ricardo bloquea el ataque con su otra mano, y antes de que pudiera usar la cadena otra vez, el villano corre hacia él y usa su brazo como si de un cajón de salto se tratara. El héroe sólo puede seguirlo con la mirada, y al caer haciendo una vuelta carnero, vuelve a atacar con la plasticola, esta vez sí acertando en la cara de Metal Man.

  Los golpes consiguientes de Ricardo hacia el frente y al suelo son fácilmente esquivados, y entre risas, el villano huye hacia un callejón. El héroe se toma un momento para quitarse los lentes oscuros y limpiar su cara, al terminar, divisa a su enemigo subiendo por las escaleras para incendios de la edificación al otro lado de la calle.

  _ Hijo de…_ retrocede un poco antes de largar un trote en dirección al callejón a donde había huido Cookie Milker, y cuando ya estaba lo suficientemente cerca, da un gran salto e impacta contra la estructura metálica, provocando que trozos de fierro salgan disparados y caigan en las cercanías. Tan solo unos metros más arriba estaba Fabian, que debe salir del asombro para comenzar a escalar lo más rápido que pueda.

  Una ruidosa persecución se produce. El héroe del metal sujetaba lo que podía para impulsarse hacia arriba, retorciendo la estructura y pasando a través de los fierros a pura fuerza bruta. El villano, por su parte, aprovechaba sus habilidades atléticas para subir con velocidad y destreza.

  Al ver que su objetivo estaba a punto de llegar a la terraza, Metal Man saca su cadena y la usa para atrapar su pierna de un azote certero. El villano consigue mantenerse sujeto a la estructura por poco, sus enguantadas manos no podrán soportar el arrastre de aquellos músculos por mucho.

  Como último recurso, Cookie Milker se suelta con una de sus manos y la utiliza para sacar una galleta de la bolsa en su chaqueta, la cual le arroja al héroe. Este último es impactado en la cara y casi pierde los lentes, por lo que con furia sacude la cadena, lanzando a Cookie Milker fuera de la escalera. El fetichista es metido a la fuerza dentro del edificio contiguo. Se queja por el dolor, pero no puede darse el lujo de tardar en eso, por lo que se apresura a buscar una salida.

  Los rugidos de Metal Man copaban el exterior, y en conjunto con el aterrizaje forzoso del villano, despertaron al due?o de casa, que se encontró con la sorpresa al salir de su habitación para ver que pasaba. Sorpresa desagradable la que debe ser entrar a tu ba?o y encontrar a un raro con máscara viéndote de forma exaltada. Cookie Milker ataca al hombre y lo neutraliza pegando sus manos al bidet, luego sale del ba?o y busca la puerta para poder huir de ahí. El sonido de un muro siendo derribado, seguido de un:

  _ Disculpar _ casi inteligible dejan en evidencia que el héroe del metal le viene pisando los talones.

  Cookie Milker sale del apartamento y se coloca en un pasillo estrecho y oscuro, se apoya contra la pared y se estira para tocar la otra con sus piernas, seguido a esto, empieza a subir hasta quedar contra el techo, luego, arroja unas galletas a la oscuridad generando un barullo que Metal Man, recién salido del ba?o, escucha y decide seguir. El villano aguanta la respiración mientras su perseguidor pasa bajo él.

  Pero el cansancio, muy bien justificado, le pasan factura, y tras no poder aguantar más debe dejarse caer, haciendo que sus zapatos resuenen contra el piso de madera.

  _ Puta madre _ dice con un jadeo. El alboroto que Metal Man estaba provocando al buscarlo se corta en seco. El fetichista sabe que fue escuchado, así que se apresura a subir una escalera en 2 saltos y llegar al piso de arriba. Aquí se apura en llegar a una ventana, la cual abre y sale por ella. Con precisión, se aferra a los relieves e imperfecciones del muro exterior para no caer y poder seguir moviéndose.

  El pu?o del héroe atraviesa el cristal, cuyos fragmentos no le hacen nada a su dura piel. De otro pu?etazo arranca el marco completo y se asoma para observar huir a su enemigo.

  _ Solo…ser…rata…inmunda _ tira un par de cadenazos, pero Cookie Milker ya estaba demasiado lejos como para poder darle _ Grgrgr…_ gru?ía de furia ante tal situación.

  El fetichista continuaba su desesperadamente lenta huida. Buscando llegar a algún punto donde la oscuridad le de la ventaja, pero algo llama su atención. Metal Man estaba colgando de la pared al igual que él, solo que con las manos clavadas en la pared, y a punta de manotazos empieza a moverse hacia el villano. Pobre de los que viven en ese edificio.

  Cookie Milker se queda sin opciones, no puede usar galletas ni plasticola en esta situación donde el uso de ambas manos es vital, por lo que sin más remedio, tratar de descender rápidamente, soltándose y agarrándose al muro rápidamente. Pero lo inevitable ocurre, y cuando ya había bajado un buen tramo, no consigue volver a aferrarse a la pared, cayendo de unos 10 metros de altura encima de un coche.

  Queda tendido entre la carrocería abollada y el vidrio astillado, parece querer moverse, pero fue mucho esfuerzo físico junto, y apenas consigue mover los brazos. Metal Man se deja caer desde lo alto, empujando un poco el auto con la onda de choque. Saca al villano de arriba del auto y lo levanta frente a él. Le quita su máscara y la arroja a un lado.

  _ Mmm _ es lo único que sale de su boca mientras observa a quien hasta hace poco veía como un compa?ero de labor.

  _ Je…?Sabes? Creo que esto es lo mejor, si alguien debía acabar con mi vida, ese eras tú _.

  _ No entender por qué decir tantas pelotudeces, pero igualmente llevarte en cana _.

  Antes de que pudiera ocurrir algo más, los compa?eros héroes de Ricardo llegan a la escena.

  _ ?Metal Man! ?Espera!_ le grita Dirts Storm tras salir de un foco cercano.

  _ Ya escuchaste al turro. Cálmate, baja al enfermo sexual y patealo hacia mí _ agregaba el Líder, que bajaba de su auto.

  _ ?Que? ?Venir a robarme crédito por atrapar Cookie Milker? ?Cómo saber que yo estaba acá?_.

  _ I assumed so _ bajaba Mark desde las alturas transformado en cuervo _ Al no encontrarte en tu trabajo y ver que Funshine no sabia donde estabas, luego fue cuestión de seguir el rastro de destruction _.

  _ Ah… Veo que mi muerte va a tener audiencia…_.

  _ Metal Man, bájalo _ decía Dirts Storm en un intento de evitar algo peor.

  _ Yo no pensar matarlo, solamente dar unos buenos azotes antes de dejarlo en manos de policía _ les explicaba el héroe del metal aun con el criminal en las manos.

  _ This guy está paranoico, piensa que lo perseguimos para matarlo y que el mundo quiere juzgarlo _ le dijo Mark a Johan tras acercarsele.

  _ Ah, ya veo _ le respondió el ex-detective _ Muy bien, fue suficiente quilombo por una noche, vámonos _ agregó para todos.

  Los héroes comenzaron a retirarse, fue entonces cuando el Cookie Milker rompió en llanto.

  _ ?Ahora qué mierda pasar? _.

  _ Perdóname, yo no quería lastimarlo _ le decía al gran héroe entre sollozos.

  = Puta, todavía además de degenerado es mogólico este imbécil =.

  _ Tu hermano trató de ayudarme, pero yo estaba asustado y…_ Metal Man dejó caer al villano. Se quedó como petrificado en su sitio, todo ante la confundida pero atenta mirada de sus compa?eros.

  _ ?Qué dijiste?_ vociferó con una claridad aterradora.

  _ Fue una tontería, me deje llevar y cuando volví en mí tenía a Chapín enfrente y el arma…_ Metal Man se llevó las manos a la cabeza con tanta fuerza que el sonido de impacto interrumpió al villano.

  Comenzó a caminar sin rumbo, gru?endo y gritando hasta apoyar la cabeza contra la pared del edificio del que se había lanzado minutos antes.

  _ ?Metal Man?_ Dirts Storm se acercaba con preocupación.

  _ Mmh… Andate preparando…_ decía Crownwell casi en un susurro.

  = ?Vos decís?=.

  = ?Pre-preparando? ?Para…?=.

  Metal Man se volteó de golpe y emitió un grito gutural como nunca antes lo había hecho. Cerró sus pu?os con tanta fuerza que el tronido de sus huesos fue escuchado 100 metros a la redonda. Los dientes le rechinaban debido a la fuerza con la que los apretaba.

  Stolen from its original source, this story is not meant to be on Amazon; report any sightings.

  Dirts Storm retrocede unos pasos con precaución, se voltea para ver al Cookie Milker en el suelo, y al ver que era en él donde estaba puesta la atención de Ricardo, dice:

  _ Esper…_ el héroe del metal lo quita de en medio con tal potencia que hace que atraviese la entrada de un negocio al otro lado de la calle. Se lanza con el pu?o en alto para acabar con el asesino de su hermano, pero al dejarlo caer es interceptado por Armstrong, quien con mucho esfuerzo lo retiene.

  _ ?Corre, pelotudo! ?Corre! _ dice a Fabian.

  El villano se levantó con torpeza, consciente del peligro pero sin saber que hacer exactamente. El vigilante de mano dura consigue reunir la fuerza para quitarse de encima el pesado pu?o de Metal Man y empujarlo hacia atrás, acto seguido, le emboca un derechazo que ladea su cuerpo, pero sin llegar a derribarlo.

  _ ?Mark! ?Llévate a este boludo de acá!_ el Skinwalker no pierde tiempo y sujeta a Cookie Milker de un brazo para guiarlo hasta el auto de Crownwell. El vehículo tenía las llaves puestas, por lo que, con la indicación de irse lo más lejos que pudiera, el fetichista lo arranca y huye de la escena.

  Mientras tanto, el héroe del metal responde a la agresión de Armstrong tomándolo por el cuello para después dar un salto e incrustarlo en el ya abollado coche donde Cookie Milker había aterrizado hace unos minutos. El rostro del vigilante comenzó a recibir una serie de furiosos y salvajes golpes que, además de volverlo uno con la carrocería, bajaban su tiempo para poder estar afuera a pasos agigantados.

  El ataque del gran héroe solo cesa cuando un tierroso proyectil impacta su cabeza por detrás. Se voltea rápidamente para encontrarse con Dirts Storm, y junto a este se coloca Mark.

  _ Metal Man, por favor stop, no somos tus enemigos _ le suplicaba de forma desesperada pero sin perder el aura elegante.

  _ Estás enojado, lo entiendo, pero no podemos permitir que hagas y lo sabes, así que no nos obligues a hacer algo que no queremos _ advertía el mugroso con Pendrivespada en mano.

  _ No se…agrande… cha-chacarita…_ Metal Man le dio un último golpe a Armstrong para callar su balbuceo y se lanzó contra sus otros 2 compa?eros.

  Ambos consiguieron esquivar el pu?etazo, el cual se incrusto en el suelo en medio de ellos. Dirts Storm se apresura a escupir un moco que mantenga el brazo de Metal Man adherido al asfalto. Por su parte, Mark se transforma en gorila y le da un golpe de martillo con ambas manos en la nuca para tratar de noquearlo, pero el efecto generado es adverso. El héroe del metal, lleno de ira, usa su brazo libre para darle un codazo en el pecho al primate, luego liberó su otro brazo de un fuerte tirón que agrieto aún más la calle.

  El grandote centró su atención en Dirts Storm, que retrocedía mientras esquivaba los guantazos mortales que le eran lanzados de forma veloz e indiscriminada. El gordo estaba consiguiendo mantener entretenido al furioso héroe, pero no iba a ser para siempre. Su cansancio, sumado a la erraticidad de los ataques, pronto harían que su agilidad sobrehumana ya no fuera suficiente.

  Sin que ninguno se diera cuenta, una corriente de insectos se acercaba a los combatientes, que estando envueltos en la pelea no veían la gran mancha aproximarse, ni oían las decenas de miles de peque?as pisadas que producían. Metal Man se detuvo cuando comenzó a sentir a aquellos peque?os seres trepar por todo su cuerpo.

  Cucarachas, miles de ellas, de los callejones, cloacas y casas a los alrededores. Todas habían acudido al llamado de Professor Mark, que desde un lugar apartado les daba órdenes, aún recuperándose del golpe en el pecho. Los insectos color cobre empezaron a cubrir al gran héroe por completo, él se quitaba decenas con las manos y agitando el cuerpo, pero en cosa de segundos los reemplazaban cientos más.

  Brian se aleja de la biomasa formada por los bichos, a su vez que aprovecha a tomarse un respiro. Los insectos empiezan a aglomerarse de tal forma que tumban a Metal Man y se colocan sobre él para contenerlo.

  _ Osiepna, yie..._ miles de cucarachas salen volando en toallas las direcciones cuando el héroe del metal emerge violentamente del interior del cúmulo formado por las mismas.

  Escupe un par de ellas y le lanza una mirada mortal al skinwalker. De un salto se sale del área rodeada por los bichos, apuntando su caída sobre Mark, este último evita ser aplastado gracias a que se aleja del lugar en forma de paloma. Metal Man no pierde tiempo y saca su guitarra, apuntando las ondas sonoras creadas por sus acordes hacia el cambiaformas, el cual termina impactado y arrojado sobre el techo de un edificio bajo.

  _ Dormite un rato, hijo de puta…_ dijo el Líder antes de disparar una bala de gas somnífero a la nuca de Metal Man. El héroe se voltea furioso, pero tras dar unos pocos pasos empieza a sentir los efectos de la sustancia inhalada.

  Dirts Storm se coloca junto a Crownwell.

  _ ?Cuánto tardará eso en dormirlo?_ le pregunta.

  _ No lo hará, pero con suerte nos dará tiempo para dormirlo nosotros _.

  Mark vuelve a una adolorida y golpeada forma humana. Sonidos de disparos y golpes provocados por la pelea que se estaba desarrollando en la calle le llegaban hasta ahí arriba, pero no fueron esos los que llamaron su atención. Cuando trataba de pararse para volver al combate, escuchó el inconfundible siseo de una serpiente proveniente de la oscuridad.

  _ ?Siomara?_ la chica emergió de las sombras con su traje de heroína puesto y su serpiente enrollada en el brazo. Mark no tardó en percatarse de que su rostro denotaba una mezcla de emociones negativas _ ?Escuchaste todo?_ Funshine desvía la mirada y camina hacia la cornisa, desde ahí contempla la batalla entre su hermano y los otros 2, o 4 _ Siomara, please, debes ayudarnos a contener a Ricardo _.

  _ No estoy segura de querer hacerlo…_ dijo en un tono cabizbajo _ Míralos _ Mark se acerca casi gateando hacia la cornisa para ver el enfrentamiento junto a la heroína. Metal Man, además de estar a medio dormir, había sido envuelto con las cintas de seguridad de Crownwell. Aprovechando la situación, Armstrong le estaba dando una serie de golpes que lo llevaban de un lado a otro pero sin lograr derribarlo. Eso finalmente lo consiguen cuando Dirts Storm aparece corriendo desde atrás del vigilante y da un salto para impactar una patada voladora en el pecho del héroe del metal _ Están golpeando a un hombre que solo quiere justicia por la muerte de su hermano peque?o _.

  _ Ricardo no busca justicia, solo venganza, y no podemos permitirlo, lo sabes _.

  _ He dicho eso varias veces pero…la diferencia entre ambas se vuelve muy difusa ahora _.

  _ Siomara…_ antes de continuar, Mark decide hacer el esfuerzo de levantarse _ It's A difficult situation, and I can barely imagine how is for you _ el lingüista salta al vacío, pero vuelve a emerger cargado por sus preciadas ratas con alas _ Ve a casa, amiga mía. Ve a casa y déjanos hacer lo correcto _ Mark regresa a la pelea con Metal Man.

  Siomara se queda viendo todo desde lo alto, claramente no va a hacerle caso al skinwalker.

  _ ?Hey!_ exclama sin apartar la vista del combate.

  _ Ash…?Qué?_ el espectro emo Emoon emerge de las sombras.

  _ ?Puedes encontrar el coche que salió de aquí hace unos minutos?_.

  _ Ah, ?qué sé yo? Si _.

  _ Búscalo, y luego llévame ahí _ de mala gana, el espectro obedece las órdenes de la heroína.

  Mark toca tierra al mismo tiempo que Armstrong le daba el último mamporro al héroe del metal, quien ahora yacía atado e inconsciente en medio de la calle.

  _ Ahhh ?La puta que te pario!_ maldecía el vigilante. La mano le había quedado doliendo _ Ah, volviste ?Que te paso?_ le pregunta al cambiaformas tras ver su semblante más serio de lo normal.

  _ All, all this…_.

  _ Uhm, si _ decía Dirts Storm mientras se acomodaba el hombro _ Si te sirve de consuelo, estamos tratando de hacer lo correcto, aunque a veces puede ser…desagradable. Quiero agradecerles otra vez por ayudarme, es especial a ustedes, no es por ofender pero…?Por qué lo hicieron? Creí que eran más afines a otro tipo de justicia _.

  _ Somos complicados _ le respondió Armstrong mientras tomaba asiento sobre el cuerpo inconsciente de Metal Man.

  _ Necesidad narrativa _ respondió el Nerd tras tomar el control un instante.

  _ Si, todo eso, y además…_ el Líder se?aló con su dedo a una de las ventanas de los edificios circundantes. En ella se veía la silueta de alguien asomándose, y más específicamente, grabando con su celular _ Hay que dar buena imagen, se?ores. Bastante malo es que nos vean golpear hasta dejar noqueado a uno de nuestros compa?eros, peor será que lo vean a él matar a alguien que hasta donde el público general sabe, solo le ha echado plasticola y galletas encima a algunas personas _.

  _ Speaking of that, ?a dónde habrá ido el Cookie Milker?_.

  _ No…no lo sé ?Viste en qué dirección salió el auto?_.

  _ Mmh, parece que se detuvo como a 20 cuadras de distancia _ se?alaba Crownwell mientras observaba una especie de tableta _ Ten _ le da el dispositivo a Brian _ Puede moverte rápido. Llega primero y…_ las explicaciones del Líder se ven interrumpidas cuando Metal Man se levanta repentinamente entre gritos y forcejeos.

  Los héroes se ven tomados por sorpresa. Dirts Storm trata de tomar distancia pero es rápidamente sujetado del brazo donde tenía el rastreador, y antes de que pudiera reaccionar, el héroe del metal lo deja semiinconsciente de un cabezazo.

  Crownwell es tomado por la gabardina y arrojado lejos antes de que pudiera sacar su revólver. Al estar por caer cambia de lugares con Armstrong, que recibe el impacto sin sufrir mucho da?o. El vigilante estaba poniéndose de pie cuando escucha como algo viene cortando el aire en su dirección.

  _ Uh, que hijo de pu…_ una tapa de alcantarilla se lo lleva puesto y manda a volar un par de metros más.

  Mark reacciona y trata de comandar sus palomas para contraatacar, pero en un veloz cadenazo es atrapado por la pierna y jalado hacia Metal Man. El gran héroe toma al lingüista por el cuello, apenas usando una milésima de su gran fuerza. El delgado cambiaformas apenas puede retorcerse un poco. Ricardo se lo acerca a la cara.

  _ No te metas _ sale de su boca a modo de advertencia sepulcral, luego deja caer al raquítico y se va saltando entre los edificios.

  Mark recupera el aire agitadamente, se toma el cuello como verificando que estuviera intacto, no es para menos considerando que pudo haberlo tenido destrozado en un instante. Se acerca rápidamente a sus compa?eros para verificar su estado, y al hacerlo nota que el rastreador ya no está.

  En otro lugar, pero no lo suficientemente lejos, un mareado Cookie Milker baja del auto del Líder recién incrustado en un poste. El villano se deja caer sobre la vereda. Respira agitadamente en un intento de recuperarse de los acontecimientos recientes, pero no hay tiempo para eso. Cuando la figura de un cuarto creciente se dibuja de la nada sobre el suelo junto a él, se da cuenta que los eventos de esta noche aún no terminan.

  El trastornado villano se lanza torpemente a un lado para evitar las figuras sombrías en forma de manos que emergen del dibujo. El único ojo que deja ver su máscara observa perplejo como esas manos arrastran 2 figuras fuera del portal. Se trataba de Funshine y Emoon. Cookie Milker reconoce a la chica, y aunque en primera instancia piensa huir, su cansancio y desgaste no se lo permiten, por lo que simplemente se recuesta contra el auto y espera su destino.

  La heroína observa al enmascarado con una mezcla de enojo y repulsión. Emoon se acercó a él y colocó el filo de su guada?a junto a su cuello, esperando la orden para acabar con él. El villano ignoró al espectro judío por completo, solo observaba a Funshine, no con enojo, miedo o algo más, simplemente la observaba.

  _ ?No vas a decir nada?_ pregunto Siomara.

  _ No hay nada que decir, nada que explicar. Solo aguardo los frutos venenosos de los árboles corruptos que plante _.

  _ ?Buscas morir?_.

  _ Busco acabar con el monstruo que habita en mí. Silenciar su voz antes de que me seduzca a lastimar a más personas inocentes para saciar su hambre. Si esta es la única manera, que así sea. Espero que te traiga satisfacción y apacigüe el dolor con el que cargas, el que yo te puse encima _.

  _ Así que sabes quien soy _.

  _ Claro que lo sé. Recuerdo a todas mis víctimas, me ayuda a sofocar mis instintos, o al menos así era antes. Tu hermano fue un héroe hasta en la muerte, me mantuvo fuera de las calles por casi 5 a?os _ Siomara trató de mantenerse fuerte, pero la mención de su hermano hizo que derramara algunas lágrimas, y en un instante rompió en un leve llanto. El Cookie Milker bajo la mirada con pena, consciente que ese sufrimiento ajeno era culpa suya _ Lo lamento tanto _ la chica volvió dirigir su atención al villano otra vez.

  _ ?Puedo saber cuales fueron sus últimas palabras?_ el fetichista alzó la cabeza ante la petición de la chica.

  Volviendo con el resto de los ángeles. Metal Man avanzaba saltando sobre los edificios en dirección al punto marcado en el rastreador cuando Dirts Storm sale disparado de una antena y lo impacta. Junto al mugroso se coloca el Professor Mark convertido en paloma.

  El héroe del metal gru?ó con furia antes de tomar su cadena y obligarlos a apartarse a punta de cadenazos. Sin perder tiempo retoma su camino, pero al saltar al siguiente edificio es impactado al costado de su cabeza por un disparo que lo desorienta y rompe la patilla de sus lentes oscuros.

  Metal Man se golpea contra el costado del edificio y cae al suelo, la caída retumba en los alrededores, terminado de despabilar a aquellos que habían sido despertados por su estruendoso andar. Se levanta escupiendo trozos de asfalto y acomodándose algunas articulaciones.

  _ Eres muy cabeza dura, literal y figurativamente _ le dice el Líder apoyado al costado de un auto.

  _ Grgrgr…Crownwell…_ el héroe del metal agarra un gran escombro y lo arroja con tal fuerza que atraviesa el vehículo de lado a lado.

  _ Meh _ oye tras de sí _ No era mío de todas formas _ el ex-detective le dispara con una extra?a arma que lo envuelve en una fuerte red de acero.

  Mark también ataca coordinando a sus hormigas para que excaven el suelo bajo él, dejándolo a medio enterrar. Johan comienza a caminar a su alrededor mientras le dispara sus balas de pegamento. Y para finalizar, Dirts Storm hackea un auto y lo conduce hasta echárselo encima.

  _ Linda arma, Nerd _.

  = Gracias, se?or Crownwell. Apreciaría que trate de cuidar más los dispositivos holográficos, son bastante difíciles de hacer =.

  _ Si si, seguro ?Hey!_ exclamo al ver a un fisgón observándolos.

  _ Nooo man, wtf _ vociferaba un chabon completamente atónito por lo que veía y grababa.

  _ ?Dame eso! _ Johan destruye el celular del tipo antes de echarlo a empujones.

  Con ese asunto resuelto y el de Metal Man resuelto, es hora de buscar a Cookie Milker, por lo que tras recoger el rastreador que Metal Man había soltado emprenden rumbo a su ubicación. Abandonaban la escena mientras Ricardo parecía retorcerse bajo el auto, pero no le dieron mucha importancia.

  Los héroes llegaron al punto marcado en el radar solo para ver el auto chocado de Crownwell, que se lamentó mucho en silencio por ello.

  _ ?Mugres! ?Dónde creen que haya ido? _.

  _ No lo sé, pero dado estas marcas y el aroma a maquillaje barato y depresión adolescente en el ambiente, yo diría que nuestro inquilino espectral tiene algo que ver _.

  Mark se apartó de los otros mientras una idea desagradable atravesaba su mente. ?Acaso Siomara había optado por imitar las drásticas acciones de su hermano? Ya era doloroso para él tener que atacar a quien ve como un amigo, esto solo hace la situación más complicada y desagradable.

  Entre todo el caos por el que su mente pasaba en ese momento, una corazonada lo impulsó a alzar el vuelo hasta el techo de la edificación frente a la que el auto estaba chocado. En la cima se encontró lo que temía, pero no exactamente como se lo esperaba.

  _ ?Siomara?_ preguntó con genuina confusión luego de posarse en una chimenea de chapa. La chica se volteo a verlo, esperaba su llegada _ What…? ?Qué está happening here?_.

  El lingüista recorrió los alrededores con la vista en un santiamén gracias a su visión panorámica de paloma. Además de a la heroína y al Cookie Milker tras esta, pudo ver al espectro emo haciéndose el interesante a un lado, ajeno a la situación hasta que se le dijera algo. Funshine dio un suspiro algo apenada por su comportamiento anterior antes de responder su pregunta.

  _ Mark, todo esto es…_ unos golpes provenientes desde la superficie llama la atención de todos. Parecían venir desde la calle, o más bien, de debajo de esta.

  _ ?Qué mierda es eso?_ se preguntaba Crownwell, que junto con Dirts Storm no tenían ni idea de lo que ocurría varios metros sobre ellos.

  De forma repentina y sin darles tiempo a reaccionar, un brazo atravesó el asfalto y sujetó al Líder de la pierna, arrastrándolo al agujero. Poco después, un Metal Man aún más furioso que antes se abrió paso a la superficie. Sin mediar palabras, sacó su guitarra y la usó para enviar lejos a Dirts Storm con el golpe de una onda sonora.

  No le tomó mucho tiempo o esfuerzo alcanzar la cornisa del edificio de un par de saltos. Mark se lanzó al ataque rápidamente. Voló en dirección a su amigo, planeando transformarse en algo más grande cuando esté lo suficientemente cerca, mas solo fue necesario el veloz movimiento de un brazo por parte del héroe del metal para generar una oleada de viento que lanzó lejos a la paloma.

  Ricardo continuó su avance hacia el Cookie Milker, pero se vio frenado cuando desde portales que aparecieron a sus lados emergieron las sombrías manos invocadas por el espectro emo.

  _ Ah, maldito indio. Las fuerzas de la oscuridad te rebanarían si no fuera por…_ antes de que pudiera terminar con su discurso, Metal Man se suelta de sus captores espectrales y le da un golpe en la cara que lo tiende en el suelo.

  _ Hmm, pelotudo…_ el gran héroe siguió su marcha, concentrando su furia a la vez que se acercaba al villano. Este parecía estar indiferente ante la situación, como esperando que el momento llegará de una buena vez.

  _ ?Detente!_ ordenó un maltratado Dirts Storm mientras se ponía entre Ricardo y su objetivo. Metal Man se detuvo un par de segundos, aunque luego siguió avanzando de todas formas _ ?Dije que pares!_ el turro puso las manos en los cierres de su buzo a modo de ultimátum.

  Metal Man volvió a detenerse. Observó al desesperado Dirts Storm a los ojos, o bueno, a sus lentes de esquí. Si algo le faltaba a ese gordo, ese algo era seguridad, y cuando Ricardo decidió seguir avanzando, él solo se quedó parado viendo a la nada con sus temblorosas manos aun en sus cierres, pero con la incapacidad de abrirlos.

  El héroe del metal al fin tenía en frente a su objetivo. Bufaba de rabia, rabia que buscaba una forma de expresarse. El villano, por su parte, se quitó su máscara para poder ver a su verdugo con ambos ojos. Extendió los brazos, aceptando su muerte inminente, algo que hace tiempo anhelaba pero sin tener el valor hasta ahora de entregarse a ello. Metal Man ahora podía ver bien al monstruo detrás de sus da?os emocionales, el hecho de que este fuera el mismo Fabian, que por tanto tiempo fue su compa?ero al que trataba con la más pura indiferencia, lo hacía enojar todavía más. El gran pu?o se alzó sobre el cuerpo del héroe, a lo que Fabian solo respiro hondo y cerró los ojos.

  _ ?Hermano! ?Espera!_ irrumpió Funshine en la escena.

  _ ?Hmm…?_ vociferó un confundido Ricardo, por la petición y por la sorpresa de que ella estuviera ahí.

  _ ?No lo hagas, es un error!_.

  _ ?Volverse loca? ?Este maldito matar Chapín! ?Deber vengarlo!_.

  _ él no lo mató _ las palabras de la chica sacan al héroe de sus deseos de impartir justicia violenta, al menos de forma parcial _ Dile lo que me dijiste, explica lo que paso _ dice al pervertido.

  _ No hay nada que explicar, nada que decir. Yo arruine su vida, él acabara con la mía, es lo justo _.

  _ ?Ay, deja de ser tan deprimente y cuéntale! ??No crees que merece saber lo que pasó con Juli en sus últimos momentos!?_.

  El villano recapacita acerca de su voto de silencio, observa a Metal Man con cierta vergüenza, pero finalmente toma el valor de hablar.

  _ Como bien debes recordar, todo pasó hace 5 a?os, era una noche especialmente difícil. Desde que me habían despojado de mi virilidad parecía que las cosas habían cambiado, el deseo estaba ahí, habían podido enterrarlo en un lugar muy profundo, pero fue arrastrándose lentamente hasta volver tan fuerte como antes. Pero ya no podía saciarlo por mi mismo, no, fue entonces que una idea llego de forma intrusiva a mi mente, unos días atrás había visto una publicidad de plasticola. Esas imágenes…, creí que había sido algo pasajero y traté de ignorarlo, pero no pude, no… pude. Sabía dónde estaba la fábrica, sabia que podía hacerlo, solo me faltaba saber que era una idea estúpida, y cuando lo comprendí ya era tarde, estaba rodeado y sin salida _ baja la cabeza mientras el recuerdo vergonzoso se manifiesta en palabras.

  _ No interesar tu patético problema _ dijo Metal Man, que se alistaba para atacar otra vez.

  _ Ojalá él hubiera pensado igual _ eso último lo detuvo de nuevo _ Cuando alce la mirada, él entró al almacén, me dijo que me detuviera y alzara las manos. No se porque, si acaso fue el hecho de que estaba visiblemente asustado y desesperado, pero su tono se calmó, me dijo que no debía temer, que no iba a lastimarme y si cooperaba todo podía acabar bien para todos. Pero yo tenía miedo, miedo de que todos se enteraran de mi problema, miedo a su dedo acusador. Saqué un arma, pero él no se fue, se acercó a mí tratando de calmarme, estaba dispuesto a arriesgar su vida por ayudarme. Entonces comencé a caminar de espaldas para mantener la distancia, fue ahí que tropecé con la plataforma de un montacargas, mi arma se cayó y se disparó. El tiro encendió una peque?a llama junto a un pack de pegamento industrial, no podríamos apagarla a tiempo. Entonces me sujetó y me llevo lo más lejos que pudo de lo que pronto seria el centro de la explosión y me cubrió con unas chapas, yo le grité que me dejara y huyera, pero no me hizo caso _ el villano derramó unas lágrimas recordando esa última parte.

  Metal Man dio unos pasos hacia atrás mientras sentía como todo su enojo se disipaba, su deseo de venganza se apagaba y unas lágrimas caían por su mejilla también, como hace a?os no ocurría.

  _ Al final logré sobrevivir, no lo merecía, y aunque la muerte de ese peque?o héroe me sirvió como lección y me ayudó a mantenerme controlado por otros 5 a?os, hoy día los impulsos oscuros volvieron, y traicione su memoria cediendo a ellos, pero tú…_ se aproximo a Metal Man y lo tomó del brazo _ Tú puedes acabar con esto, con un solo golpe, solo eso te pido _.

  Metal Man observó con incertidumbre al villano, pero tras razonar sus palabras, se apartó de él.

  _ No _ dijo firme _ Chapín perder vida por salvar la tuya, yo no arruinar su último deseo _ Cookie Milker bajo la cabeza con cierta decepción, pero luego volvió a alzarla con una sonrisa leve.

  _ Entiendo _ camino hasta la cornisa, contemplo la ciudad a oscuras una última vez, pensó en aquellos que lastimó, aquellos en los que causó temor, y en aquellos a los que en cierta forma hizo sentir mejor _ Quizá sea la mejor última cosa que puedo hacer _.

  _ U-un momento, no. ?Espera!_ Dirts Storm se levantó y se acercó a él, pero antes de que pudiera hacer algo útil, el villano se lanzó a la oscuridad, no como el Cookie Milker, si no como Fabian.

  Los presentes quedaron atónitos por la situación, fue entonces que un sonido seguido por una luz cegadora que los iluminaba desde arriba los sacó del shock. Estaban siendo observados y grabados por un helicóptero que sobrevolaba el edificio, mientras que en la superficie, decenas de periodistas y curiosos llegaban a ver que había pasado, demasiado ocupados en la cima de la edificación como para notar a un golpeado Crownwell que asomaba la cabeza por el agujero que el héroe del metal había hecho en la calle unos minutos antes.

  _ Puta madre…_ suspiro antes de volver a meterse al agujero.

  Fin.